Argumento
Un lavado en seco de los trapos sucios de la televisión, para después airearlos a través de la crítica cáustica y el humor corrosivo. Garamendy disecciona en tres monólogos la relación directa y abusiva entre los programas de televisión y el espectador. Con la intención de despertar el sentido crítico de los adictos al mando a distancia,
el vitriólico actor da rienda suelta a su verbo incisivo y dispara a dar contra la decadencia de los reality shows,
la influencia de los programas de nouvelle cuisine sobre los hábitos de los telespectadores y esos aquelarres modernos llamados tertulias del corazón.
Así, compone una auténtica carta de ajuste (de cuentas), tan divertida como reflexiva y necesaria.