El Teatro Campoamor es el epicentro de la actividad cultural en Oviedo y en Asturias. Además, en el caso de la lírica, paradigma y referente en España. Desde su inauguración, en 1892, el Campoamor ha sido visita obligada para grandes maestros y divas de este género. Han pisado sus tablas, entre otros, Rubinstein, Ravel, Bartok, Rostropovich, Yehudi Menuhin o Mario del Mónaco y Victoria de los Ángeles, con quienes se reinauguró el coliseo en 1948, tras haber quedado prácticamente devastado durante la Revolución de Octubre del 34. También han recibido el aplauso del público ovetense desde este teatro Alfredo Kraus, Montserrat Caballé, José Carreras, Mirilla Freni o Pavarotti.
Situado en el corazón de Oviedo, a pocos metros de la arteria principal de la capital, la calle Uría, y del Campo San Francisco, el Campoamor presume de tener la segunda temporada de ópera más antigua de España, tras la del Liceo de Barcelona, y acoge, junto a Madrid, la única temporada de zarzuela existente en España. Es sede también de la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias, considerados por muchos como los segundos en importancia del mundo, tras los Premios Nobel.
Ubicado en los terrenos del convento de Santa Clara, el proyecto de este espacio cultural comienza a gestarse en el año 1876, con José Longoria Carbajal en la alcaldía de Oviedo y a propuesta del escritor y entonces concejal, Leopoldo Alas «Clarín». El nombre del teatro fue propuesto, años después, en la sesión municipal de 10 de mayo de 1890 por el propio Clarín, quien propuso que el “Nuevo Teatro”, como así se conocía entonces, llevase el apellido del político y célebre poeta naviego Don Ramón de Campoamor. Fue aceptado por unanimidad.
El teatro Campoamor nació como escenario en el que representar óperas y funciones teatrales debido a la demanda de burguesía que afloraba en la capital. Hasta entonces las funciones se representaban en el teatro del Fontán, al lado de la plaza del mismo nombre, hoy sede de la Biblioteca de Asturias Ramón Pérez de Ayala. El 17 de septiembre de 1892 se inauguraba el Teatro Campoamor, con una representación de la obra de Los Hugonotes de Giacomo Meyerbeer.