El teatro se alza en la Plaza que lleva también el apellido del actor Julián Romea. El edificio fue inaugurado bajo la denominación de Teatro de los Infantes, luego pasó a llamarse Teatro de la Soberanía Popular y, por último, Teatro Romea, una vez fallecido el actor. El edificio sufrió a lo largo del siglo XIX dos aparatosos incendios (1877 y 1899), quedando tras el último sólo los muros. Las obras de reconstrucción tras los incendios y la importante rehabilitación sufrida en el año 1985 han hecho que este monumental teatro haya sido inaugurado en cuatro ocasiones.