Argumento
Inma “La Bruja” crea este monólogo a su imagen y semejanza: lucidez, sinceridad y humor conducen por un recorrido sorprendente dibujado por su voz. El público la acompaña en un viaje que le traslada a situaciones por todos reconocibles, pero que ahora se presentan envueltas en surrealismo e ironía.
Su voz salpica el monólogo de cantes, ilustrando sus reflexiones de una forma visceral. En un contexto de aparente lenguaje popular, pronto descubre el espectador un fondo de brillante humor e inteligencia, donde subyacen reflexiones de universal alcance.
Dando el cante es un viaje lleno de descubrimientos que nos sumerge en un mundo mágico, no exento de verdad, configurado con una línea de discurso que sorprende, divierte y emociona.