Un hombre. Todos los hombres. Un tiempo. Todos los tiempos.
En esta puesta en escena encontramos al individuo perdido en una calle intentando detener a alguien que le escuche su idea. Pero también encontramos a cada uno de los individuos a los que detiene. A aquellos que no detuvo. Le conocemos a él mismo dejando un legado en vídeo para la posteridad (que es lo que Koltès hizo con su propio texto).
La propuesta de AlmaViva Teatro es ese grito de uno hombre que puede ser todos los hombres y mujeres. Un hombre que vive en un tiempo determinado, que vivió o que vivirá en todos los tiempos.
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Montaje completo La Noche Justo Antes de los Bosques