La exforma se propone como un solo de improvisación que atraviesa las formas de la danza en la búsqueda de un lenguaje no lineal sino espacial; una realidad no polar sino aromática.
Dijo: Se siente una corriente. Como si ya lo hubiera vivido. Y es la primera vez que estoy aquí. Un sutil viento eléctrico, impronta de un principio ordenante profundo e inalterado, que ciertos ritmos o aromas distribuyen por el cuerpo. Lo que no sabe es que quiere decirle, o incluso si la comunicación es siquiera posible entre dos formas o inteligencias tan diferentes.
La simetría del sabor ha sido rota espontáneamente; por alguna razón, el vacío de su teoría contenía un condensado que ha tomado la batuta violentamente. Cuando le preguntaron acerca de lo que más deseaba, comentó que quería aprender a temblar