DOS ESTRELLAS, UN FIRMAMENTO.
La obra musical relata un episodio real y documentado, pero desconocido por el público, de la historia de Miguel de Molina e Imperio Argentina.
Miguel de Molina, exiliado en 1942, desde México le envía una carta a Imperio, (la cual está en posesión de la compañía) pidiéndole ayuda para reunirse con ella en Argentina y hacerse un hueco entre su público. Ésta acepta, montan un espectáculo juntos que estrenan el día 5 de Agosto de 1951 con gran éxito. En agradecimiento, Miguel le regala a Malena (Imperio) un mantón de Manila (dicho mantón original es utilizado en la obra).
Tras la gira, Imperio regresa a España, mientras que Miguel se queda en Argentina para siempre.
Parte del atrezzo y vestuario de la obra, pertenecieron a los protagonistas originales.