Argumento
Los entremeses de Cervantes son como un árbol en el que siempre se descubren brotes inesperados. La Abadía, que ha llevado “sus” entremeses por numerosos teatros, en España y en el extranjero, logrando una conexión con el público que sorprende al tratarse de textos de hace cuatro siglos, aborda ahora, de la mano de Ernesto Arias, otras dos piezas: La guarda cuidadosa y El rufián viudo llamado Trampagos.
El solitario árbol que en la anterior producción de La Abadía, Entremeses, moraba en un ambiente rural y soleado, donde era testigo de los tres entremeses que en aquella ocasión se representaban desde el amanecer hasta el anochecer, se ha transformado en un pozo, en medio de un entorno urbano y sombrío, donde presencia estas dos nuevas historias revestidas de ambientes humildes, míseros, d