Bernardo “Buba” Espinho y António Caixeiro son dos de los artistas más activos hoy en día en cuanto a la difusión del cante alentejano. Junto a Bruno Chaveiro han formado A Porta do Cante. El fado emblema musical del país, asociado a sentimientos de tristeza, añoranza, pérdida y ese sentimiento tan tan portugués, de la saudade. El cante alentejano, de la región de Alentejo, surge en el mundo rural. Se suele manifestar como canto coral, aunque pueden ser interpretadas también a solo. Tras algunas décadas caído en el olvido y con un futuro que se auguraba negro, debido al éxodo del campo a la ciudad, el cante alentejano se ha visto fortalecido en los últimos tiempos por el trabajo de grupos de artistas muy jóvenes que acogen y desarrollan su herencia cultural con gran respeto y conocimiento.