Sofía está castigada en su habitación cuando de repente se va la luz en todo el barrio. A Sofía le da mucho miedo la oscuridad. Asustada llama a su padre pero en su lugar aparece el Rey Basilio, que conducirá a Sofía al mundo onírico de La vida es sueño.
¿Es el castigo un buen método de reprender a los niños o es una técnica obsoleta? ¿Deben los niños obedecer en todo a sus padres sin cuestionarlos? ¿Tienen los padres siempre la razón? ¿Tienen derecho a reprimir las libertades de sus hijos? ¿Qué lecciones nos enseñan a los adultos?Todas estas cuestiones se plantean en nuestra versión para que padres e hijos reflexionen y que individualmente lleguen a sus propias conclusiones. Pero sobre todo queremos que los padres y madres vuelvan a ser niños y los niños padres.