Durante la Guerra Civil Española, en un barco lleno de niños exiliados que navega hacia la ciudad de Morelia, México, dos adolescentes celebran juegos mortales para intentar evadirse de su contexto, mediante el fantasioso y macabro mundo que han creado entre los dos. En los juegos emerge la terrible cotidianidad de la vida de los 454 niños del barco así como, mediante un oscuro mecanismo, la premonición de lo que les espera: los malos tratos, las cartas de los padres arrepentidos, las historias de las víctimas del director del internado, un hispanófobo…
Durante estos juegos, poco a poco, las verdaderas necesidades e intenciones de los dos niños reclaman su espacio.