Don Clemente, tras seis años de amor con Doña Hipólita, se muestra cansado y visita a Doña Clara, que por su parte goza de los favores de cuatro hombres. Doña clara se acaba de mudar de casa, a la que llega Don Clemente para pedirle explicaciones. Por su parte, Don Clemente también ha tenido tratos íntimos con otras mujeres. Uno y otra, junto con sus respectivos amantes, se ven envueltos en situaciones de enredo hilarantes en las que los celos, las excusas y las inútiles maniobras para escapar de tesituras comprometidas, conforman una comedia elegante y muy divertida.