Imaginamos esta nueva pieza como una casa.
El teatro y la casa se oponen en cuanto a la noción de ritual público y privado. El escenario no pretende ser aquí un lugar de demostraciones, sino un lugar íntimo de manifestaciones para poder salir de los márgenes físicos de nuestro entorno y observar las tensiones de las fuerzas que rigen la misma idea de vida. Un espacio cuadradado ocupado por objetos y recuerdos.
En esta nueva creación nos hemos centrado en un aspecto de la casa: La ventana. Con la significación según el diccionario: una apertura en un muro para dar espacio al aire y a la luz, comienza la labor compositiva. Este trabajo intenta cuestionarse acerca de los fragmentos, recortes de vida, situaciones que se dejan ver a través de un marco.