Argumento
Cuando ustedes lean estas palabras no sé cuántas periodistas más habrá muerto en México a manos de sicarios protegidos por el gobierno. Es necesario que esta infamia se conozca y que la historia de Lydia Cacho se reivindique y se denuncie desde el escenario.
Para contar la historia de ese secuestro usamos dos lenguajes: el teatral y el cinematográfico. Realmente es teatro, pero parece cine: una operadora de cámara sigue en todo momento a la protagonista, los planos que recoge esa cámara en directo combinados con los de otras cinco cámaras ocultas entre la escenografia se proyectan en una gran pantalla. El espectador ve a la actriz sobre el escenario pero también tiene la opción de verla en la pantalla como si se tratara de un thriller cinematográfico.