No importa de donde vienen ni a donde van, ni tan solo saber si realmente llega a suceder.
(ÍOR) es simplemente un paréntesis.
Un encuentro efímero que se dilata en un espacio-tiempo de nuestro imaginario y nos arrastra en una espiral de fuerzas contrarias que se ayudan y se impiden mutuamente.
Un viaje in crescendo entre dureza y fragilidad, dos cuerpos en
busca de la simbiosis perfecta que les permita, juntas, seguir avanzando.