Argumento
Se buscan familias. Familias que pidan paella de verdura y denuncien, si se la dan con carne. Familias que limpien los domingos por la noche, cenen pizza precocinada, beban agua del grifo, y les guste. Familias dispuestas a pasarse los miércoles por la mañana llamando a fiscalía de menores, aunque nunca cojan el teléfono. Familias que acompañen a niñes o jóvenes que necesiten un hogar, que no unos padres. Porque no es lo mismo querer adoptar que aceptar acoger. Ni es lo mismo ser funcionario que ser Mary Poppins para rediseñar el nuevo modelo de acogimiento residencial de la Generalitat.
Cuatro intérpretes de entre 21 y 72 años hablan y bailan su historia, su generación y sus experiencias con el sistema de protección del menor.