Argumento
Carmela vuelve una y otra vez. Vuelve su recuerdo contra el olvido. La evocamos para que su espíritu no se pierda en el cómodo mundo de la indiferencia. Vuelve a alertarnos, a gritarnos con su presencia que el huevo de la serpiente, que siempre ha estado ahí, se está rompiendo.
Nuestro sueño de un mundo de tolerancia, de comprensión, de permisividad hacia lo diferente, de igualdad, de solidaridad, de justicia social se va resquebrajando y el mundo fascista de intransigencia, terquedad, obstinación, testarudez avanza tan incompresible como imparablemente. Carmela es nuestra memoria y nuestra culpa como lo es de “El Paulino” , el “cagón”. ¿A quién nos recordará?
Pero ahí está Carmela con su verdad, su vitalismo, su pasión y su valentía.