En pleno barrio de SanFran crece Rosa, una niña violinista que cree ver a Liszt y a otros compositores difuntos que le ayudan a tocar el violín.
La Tarara, una mujer prostituta que trabaja la noche, acompaña a la niña en la lucha contra sus fantasmas. La Rosa adulta y la Rosa niña se entrelazan en un ir y venir de recuerdos que revolotean sobre un secreto apenas presentido: un incendio, cenizas y el olvido, que se extiende como un manto protector.
Hasta que unas cartas de amor encontradas en un cajón rescatan la memoria rota de una niña tan llena de música y belleza que no guardaba hueco al espanto.