Tomando como inspiración de partida la colección de grabados “Caprichos” de Francisco de Goya, Javier Barón y Alfonso Zurro se toman de la mano, con la complicidad de Rosario Toledo como bailaora invitada, para crear una fantasía flamenca, un festín de baile donde el empaque marida con el humor, la maestría se enreda con el delirio, y la estética goyesca que quizá esperaríamos cede paso a una apuesta rabiosamente contemporánea. Con los caprichos musicales
brotados de la creatividad inquieta de José Torres, y el cante sabio de Antonio Campos. Pasen, siéntense, disfruten... Aquí un dulce sueño de la razón produce “oles”