Si el escritor Delibes me enseñó a mirar, el cómico Fernán-Gómez, a escuchar.
Durante unos cuantos años tuve el privilegio de estar cerca de él y escucharle.
Escucharle, entre otras, la historia de Fernanda López, "la rubia", su bisabuela, de la que heredó el color de pelo y que era de Valdelaguna, un pueblo al lado de Chinchón, el mío. Y de Carolina Gómez, costurera, la abuela que cuidó de su infancia como Natividad López, sus labores, cuidó de la mía.
Intercambiamos y compartimos coincidencias en otras tantas historias.
Historias de supervivencia, de ausencias, miedos, esperanzas, sueños: de libertad, de "llegar a ser alguien", de ser ¿por qué no? Jackie Cooper, "el de La isla del tesoro", y también "escritor de novelas de Salgari".