El escenario catalán ofrecerá del 5 al 15 de mayo una nueva edición del ciclo Radicals Lliure
24 de enero de 2011El Teatre Lliure de Barcelona volverá a celebrar una nueva edición del ciclo Radicals Lliure (y van cinco) del 5 al 15 de mayo. Por espacio de diez días, el ciclo ofrecerá siete coproducciones y varios espectáculos invitados, formando una interesante programación dedicada a la escena reciente de la creación contemporánea. Dos semanas que incluyen el Radical Weekend, la cita anual de profesionales que une a artistas y programadores de todo el mundo en el escenario del Lliure con el apoyo del Institut Ramon Llull.
Durante estos días desfilarán por el Lliure nombres tan destacados de la escena nacional e internacional como Babazorro Rodríguez, Nao Albet y Marcel Borràs, David Franch y Lídia González Zoilo, Jordi Oriol o Rodrigo García.
Igualmente, el escenario del Lliure ofrece un anticipo del ciclo el 19 de febrero con el montaje de La casa de la fuerza, una creación de Angélica Liddell y su compañía Atra Bilis Teatro, en coproducción con Teatro de la Laboral, Iaquinandi, Centro Párraga y el Festival de Otoño de la Comunidad de Madrid, así como con la colaboración de Entrepiernas Producciones (México), Teatro Línea de Sombra (México) y el Ichicult (Instituto Chiluahuense de Cultura de México).
Angélica Liddell dirige a los intérpretes Cynthia Aguirre, Perla Bonilla, Paul de Nut, Getsemaní de San Marcos, Juan Carlos Heredia, Lola Jiménez, María Morales y María Sánchez en cinco horas de teatro en la casa de la soledad, con siete actrices, un violonchelista, una orquestra de mariachis, el campeón de Strongman de España y una ATS.
El montaje, uno de los grandes éxitos del Festival de Otoño de Madrid 2009 y del Festival de Avignon 2010, se estrena así en Cataluña. Cuenta Angélica Liddell que el 2 de octubre de 2008, día de su cumpleaños, se sintió asustada, furiosa y triste: “Estaba jodida por el paso del tiempo, y ya era plenamente consciente de que había perdido todo lo que amaba o había amado”.
Ese mismo día, en busca de algún tipo de contradicción, se apuntó a un gimnasio, uno de esos lugares de los que siempre había echado pestes. Y allí, precisamente, nació su último espectáculo. La casa de la fuerza es la casa de la soledad, explica Liddell: “Ese lugar donde se compensa el agotamiento espiritual con el agotamiento físico. Es el sitio donde no somos amados y hacemos ejercicios de no-sentimientos para compensar el exceso de sentimientos. Es el sitio de la humillación y de la frustración”.
Autora, directora teatral y actriz, Angélica Liddell muestra una personalísima trayectoria escénica, jalonada de piezas inclasificables como Once upon a time in West Asphixia (2002), El año de Ricardo (2005) o Perro muerto en tintorería: los fuertes (2007), entre otras. Acuñadora de un lenguaje teatral cimentado en dialécticas imposibles, sus producciones oscilan entre el expresionismo desgarrador, la crítica social, la pureza, la escatología y la búsqueda del significado a través del dolor y la subversión. La casa de la fuerza nos habla, según su autora, sobre cómo “el amor fracasa, la inteligencia fracasa, y nos destrozamos los unos a los otros, por cobardía, y humillamos y somos humillados hasta el final”.
La ceremonia de esta 33 edición se celebró el lunes 10 de marzo en el Teatro Circo Price de Madrid.
La despedida del intérprete, que falleció ayer 2 de marzo en Madrid a los 84 años, se celebrará hoy lunes en el cementerio de la Almudena de Madrid.
El teclista, fundador también del grupo musical Mishima, ha fallecido a los 51 años a causa de un cáncer que le diagnosticaron en el 2022.