La cantante mallorquina rinde homenaje a Chavela Vargas con un recital el domingo 27 de marzo
Concha Buika, una de las intérpretes españolas más particulares del momento, presentará el 27 de marzo los temas de su disco El último trago en el Teatro Barakaldo Antzokia, álbum por el que ha recibido el Premio Grammy Latino al Mejor Álbum de Música Tropical Tradicional. La cantante mallorquina ha querido con este trabajo rendir homenaje a Chavela Vargas y a Bebo Valdés en sus 90 cumpleaños. El disco se ha grabado en directo en Cuba en los Estudios Abdala con Chucho Valdés y su cuarteto. En esta ocasión, Concha Buika estará acompañada por Iván González Lewis Melón al piano, Danny Noel en contrabajo y Fernando Favier en percusión.
Mallorquina de nacimiento, pero con sus orígenes en Guinea Ecuatorial, la cantante se ha convertido en una verdadera revelación para los que consideraban que el flamenco no tenía ya demasiado que aportar a la canción española y al jazz. Sus evidentes raíces africanas y su cosmopolitismo cultivado en Nueva York y Las Vegas durante años de clubes, suman, para dar a Concha Buika todo el savoir faire de las grandes.
De su madre aprende a escuchar a las grandes voces del jazz, pero desde la ventana de su casa y por la radio se cuelan las coplas de toda la vida y en la calle se pega el quejío flamenco que quedará definitivamente impregnado a su piel. Se inició cantando en bares y clubs de Mallorca hasta que 2000 llegó a Las Vegas para trabajar en casinos como doble de Tina Turner y The Supremes, y donde fue invitada por Rachelle Ferrell a cantar en el Club Blue Note.
Después, se instaló en Madrid y grabó su primer disco, donde demostró la infinita posibilidad de sus talentos. Con su segundo disco Mi niña Lola, producido por Javier Limón, recibió el crédito, el reconocimiento y los premios, llegando a los grandes festivales. Su tercer álbum, Niña de Fuego, también de la mano de Javier Limón, se instala en la copla, viaja por primera vez a la ranchera y canta temas inéditos compuestos por ella misma y por Javier Limón.