El Teatro Romano de Mérida aguarda la ‘Antigona’ de Ernesto Caballero

El Teatro Romano de Mérida está preparado para acoger el esperado estreno de la versión que ha realizado Ernesto Caballero de la Antígona de Sófocles, bajo la dirección del mexicano Mauricio García Lozano y un elenco encabezado por Marta Etura (Antígona), Antonio Gil (Creonte), Elías González (Hemón), María Botto (Ismene), Alberto Amarilla (mensajero) y Rosa Manteiga (Eurídice). Además, el montaje, programado los días 11, 12, 13, 14, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 23, 24, 25, 26, 27 y 28 de agosto, cuenta con el atractivo de disfrutar sobre el escenario de Blanca Portillo, directora del Festival de Mérida, que escuchó la petición del director mexicano y participa en el espectáculo interpretando al visionario Tiresias.

Esta producción será la tercera y última de las versiones tan distintas del mito de Antígona programadas en esta edición del certamen de teatro clásico, que ha presentado el personaje en tiempos y dramaturgias distintas, además de protagonizados por repartos y directores de primera fila.

Según Mauricio García Lozano, desde su fragilidad, Antígona erige la fuerza de su convicción contra todo y contra todos: “En Antígona, el valor de la muerte es, sin metáforas, el valor de la vida”. Jóvenes contra viejos… vivos contra muertos… hombres contra mujeres… individuos contra sociedad… dioses contra humanos… “Como bien lo explica Steiner, en la Antígona de Sófocles se sintetizan los cinco conflictos estructurales de la raza humana. Quizás por eso, o quizá por algo más intangible, mucho menos explicable, leo este texto como una experiencia espiritual”.

En Antígona, explica el director del montaje, el valor de la muerte es, sin metáforas, el valor de la vida. Su viaje personalísimo hacia la oscuridad es un viaje hacia la luz. Luz ejemplar. Luz de un horizonte amanecido: “Por esto, y en apego a sus orígenes, nuestra Antígona quiere ser un ritual. Un ritual contemporáneo que transite entre los opuestos y acumule una energía potencial capaz de dinamitarlo todo y que, como la heroína, libere su luz transfigurando lo imposible”.