Quasar Teatro recupera la figura de Joe Orton con el montaje ‘El rufián en la escalera’

La compañía cántabra Quasar Teatro presenta el próximo 28 de octubre su espectáculo El rufián en la escalera, del dramaturgo inglés Joe Orton, dentro de la programación de otoño del Teatro Rigoberta Menchú de Leganés. El montaje, que cuenta con la colaboración del Palacio de Festivales de Cantabria y la Consejería de Cultura de dicha comunidad, es un espectáculo ha sido recomendado por la comisión artística de La Red, “un respaldo  muy importante pata la compañía”, reconoce Mónica González, directora de Quasar Teatro.

El montaje, dirigido por Ricardo Moya, está protagonizado por los intérpretes Fernando Madrazo, Mónica González Megolla y Carlos García Escudero. La obra de Orton, uno de los dramaturgos ingleses más originales del siglo XX, coincide a la perfección con el “compromiso ético y estético de Quasar”, explica González: “Somos una compañía joven, pero buscamos textos que tengan un compromiso social y político determinados…. Y la obra de Orton posee una aridez irónica que nos interesaba mucho y que coincidía de pleno con los parámetros que buscábamos”.

El rufián en la escalera recrea la historia de Joyce y Mike, un matrimonio integrado por una ex prostituta y un matón, que se cruzan con Wilson, un joven peluquero de caballeros, al que le realquilan una habitación tras la muerte de su hermano. Fue el director el montaje quien recomendó a la compañía el texto de Orton, “con los deslumbrantes vericuetos de sus personajes”. A partir de ahí, la compañía emprendió la traducción del texto porque únicamente encontraron una traducción latinoamericana “muy mala”. María González indica que la decisión de montar la obra de Orton era “un riesgo y u a apuesta difícil. A pesar de su calidad, todavía se trata de un autor a descubrir por el gran público… De hecho, en España prácticamente no se ha puesto en escena!.

El autor consiguió crear un estilo propio, utilizando un lenguaje elegante en situaciones trágicas, lo que daba a sus tramas una especie de aire absurdo. A través de sus personajes expresó la dinámica década de los 60, haciendo que se burlasen de los viejos valores, confiriéndoles un espíritu rebelde y poco convencional, que tendía al humor negro. Su obra transgresora y de vanguardia creó, junto a la de Harold Pinter, un nuevo teatro inglés, satírico y macabro. Sus trabajos se ubican entre lo convencional y lo absurdo, equilibrándose delicadamente en ellas un humor rufianesco y una macabra protesta social, aderezados por un fino oído para el diálogo no convencional pero a menudo decididamente cómico.

Concebida como una radionovela, El rufián en la escalera (cuyo título original era The boy hairdresser) se emitió en agosto de 1964 por la BBC. Su autor, Joe Orton decidió reescribirla y adaptarla a la escena, cambiando el título. Así, en 1967, la pieza se estrenó en el West End londinense. Fue, prácticamente, su última obra.