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Alicante se convierte en la capital del teatro español contemporáneo

04 Noviembre 2011

La Muestra de Teatro Español de Autores Contemporáneos presenta, del 4 al 13 de noviembre, un total de 28 espectáculos

Alicante se convierte en la capital del teatro español contemporáneo

Alicante acoge del  4 al 13 de noviembre una nueva edición de la Muestra de Teatro Español de Autores Contemporáneos, que presenta una programación compuesta por 28 montajes que tienen en común  tener como protagonista principal a los creadores de la dramaturgia española contemporánea, más allá de la generación a la que pertenezca o al estilo  de su escritura dramática. Además, el certamen rinde un homenaje a Salvador Távora, personalísimo creador interdisciplinar que ha desarrollado una intensa labor de escritura escénica y dirección al frente de la compañía La Cuadra de Sevilla.  

Guillermo Heras, director de la Muestra de Alicante, destaca que este año se ha mantenido la apuesta por un proyecto a pesar de los severos recortes presupuestarios a los que la organización ha tenido que enfrentarse: “A lo largo de todos estos años hemos sido un equipo que ha  mantenido una línea de trabajo en defensa de la dramaturgia española contemporánea…. No son buenos tiempos para ponernos a inventar la pólvora ni nada por el estilo”. De esta forma, la Muestra de Alicante es un proyecto que cuenta con el patrocinio del Ministerio de Cultura a través del INAEM, la Diputación y el Ayuntamiento de Alicante,  la CAM, la Fundación Autor, con la colaboración de Teatres de la Generalitat de Valencia y la Universidad de Alicante.

Heras explica que ha tratado de dar “continuidad” a un proyecto, con unas líneas de actuación muy definidas, manteniendo el número de espectáculos. “Tratamos de dar a conocer a los autores y autoras del teatro español del momento, independientemente de la generación en la que hayan nacido”. La Muestra de Alicante se caracteriza, en opinión de su director, por la “diversidad” de propuestas de calidad que coexisten en su programación, “tanto de producciones como de estilos, porque mantenemos abierta la programación a “múltiples formas de entender el texto dramático, incluido los espectáculos infantiles, de calle, de cabaret… Dentro de esas propuestas también hay un autor y un texto detrás”. Y siempre, dice Guillermo Heras, “hemos mantenido que no nos damos cuenta de lo mucho y bueno que tiene el teatro español con estos autores. En muchos casos sigue existiendo un gran desconocimiento, como comprobamos al ver que las grandes compañías, los grandes centros de producción siguen apostando por los repertorios más conocidos. Los autores vivos se representan, claro, pero mayoritariamente gracias a la apuesta de las compañías independientes”.

Además, uno de los objetivos del equipo de organización ha sido intentar llevar la muestra por toda la ciudad de Alicante. “Utilizamos los múltiples espacios escénicos que hay en la ciudad, pero también otros espacios”, comenta Heras, que destaca que, tal vez, haya que buscar novedad en la gestión más que en la programación: “Hemos hecho un esfuerzo por llegar a todos los barrios de la ciudad, trabajando con colectivos y asociaciones, ofreciendo unos abonos a unos precios muy asequibles. Nuestra preocupación ha sido ganar otros segmentos de públicos, llegar cada vez a más gente”.

Sobre el reconocimiento a Salvador Távora, Guillermo Heras considera que este homenaje ayuda a abrir la puerta a una parte importante del teatro español contemporáneo, a creadores interdisciplinares que como en este caso han desarrollado una intensa labor de escritura escénica y de dirección: “Salvador Távora representa otro modo de escribir, diferente a esos autores que escriben en la soledad del despacho”. Al frente de La Cuadra de Sevilla, Távora ha ido desarrollando a lo largo de los años una rica dramaturgia escénica, mezcla de tradición y modernidad a través de la investigación profunda en el mundo del flamenco, lo que le convierte en uno de los más personales artistas escénicos de nuestro país. Su intensa labor de escritura escénica y dirección se ve reflejada en numerosos montajes que han quedado en la memoria viva de la Historia del reciente teatro español. Entre estas puestas en escena destacan Quejío, Nanas de espinas, Piel de Toro, Carmen o Flamenco para Traviata. En esta ocasión, La Cuadra acercará hasta Alicante el montaje Rafael Alberti, un compromiso con el pueblo, donde hace su particular revisión al espíritu poético del poeta gaditano.

La programación de la Muestra de Alicante ofrece propuestas para todos los públicos, incluidos los sectores infantil y juvenil, con comedias, dramas, espectáculos de calle, de cabaret o teatro popular, además de exposiciones de libros y talleres de dramaturgia. Entre las propuestas, se pueden destacar los montajes Eufòria de Roberto García (L’Horta Teatre); Anomalía magnética de Iñaki Eguiluz (Markeliñe); En esta crisis no saltaremos por la ventana de Pedro Montalbán Kroebel (Teatro Emergente); Patético jinete del rock and roll, con el que Jesús Campos ganara el Premio Tirso de Molina 2001 (Teatro a Teatro); Duda razonable de Borja Ortiz de Gondra (Vaivén Producciones); Queipo. El sueño de un general de Pedro Álvarez Ossorio (La Fundición de Sevilla/Escarmentados); Yayos de Joan Carles Simò (Germinal Producciones); Santa Perpetua de Laila Ripoll (Micomicón); La ventana de Chigrinsky de José Ramón Fernández (Teatro del Zurdo); Nadie lo quiere creer, de Eusebio Calonge (La Zaranda); Días estupendos de Alfredo Sanzol (La Zona), entre otras.

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